¡Bienvenidos al Reino animal!
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El guepardo Acinonyx jubatus

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Los guepardos son los gatos también ¡pero son los gatos únicos! Este animal es tan original que los zoólogos lo destacan en un género especial o hasta en una subfamilia. Los peculiaridades del guepardo son principalmente su modo de cazar que no es típico para los gatos – alcanza su víctima corriendo. Hasta que el aspecto de este carnívoro extraordinario parece más a un galgo esbelto de piernas largas que a un gato (fotos 1, 2, 7, 8). Su cabeza no es grande, los ojos dispuestos alto y las orejas pequeñas redondas (fotos 3, 4, 5) – todo eso se necesita para dar al cuerpo propiedades aerodinámicas. A diferencia de otros félidos las uñas del guepardo no se esconden, lo que contribuye la mejor cohesión con la tierra y le ayuda correr sin perder la estabilidad, cuando corre a toda velocidad saltando a los 6-7 metros. La columna vertebral muy flexible (foto 6) y la cola larga con manchas le dejan al guepardo hacer los virajes abruptos a toda velocidad. El objeto de caza principal de este carnívoro son los antílopes pequeños de pies ligeros. Cazando, primeramente les acerca cautelosamente luego los trata de captar en una carrera corta, durante la cual a menudo desarrolla la velocidad más de 100 kilómetro por hora. El guepardo es un velocista excelente porque puede alcanzar los 85 km per hora en sólo 3 segundos, lo que es ¡más rápido que un Ferrari! Pero no puede correr tan rápido más de 20 segundos en la distancia de no más que 400 metros. Si sigue corriendo los músculos necesitarán tanto oxígeno que hasta el corazón fuerte y pulmones voluminosos del guepardo no podrá garantizarlo. Por eso si no alcanza la víctima al correr los primeros cientos metros, el cazador se ve obligado a dejar de perseguirla. Las mandíbulas son bien débiles pero en el primer dedo de las extremidades delanteras tiene una gran garra aguda. Cazando la usa como arma principal: agarra el lado o la pata trasera de la víctima y la pone en la tierra.

La vida social de estos carnívoros singulares también es algo extraordinaria: los machos de la misma camada suelen unirse en los grupos (las llamadas coaliciones) que viven y cazan juntos; mientras que las hembras por lo regular mantienen el modo de vivir solitario. Sin embargo, a veces varias hermanas pueden criar la descendencia juntos (en cautiverio pueden unirse también hembras que no son familiares). La gestación dura 85-95 días, luego nacen de dos hasta seis gatitos. Las crías indefensas pueden ser víctimas de todos los carnívoros fácilmente debido a que no hagan los guepardos ninguna madriguera. Sin embargo, a lo largo de la espalda tienen una melena espesa de color ceniciento que les disfraza y así los defiende de los ojos de enemigos. Abren los ojos después de unos 10 días y en la edad de tres semanas ya pueden seguir su madre. Pero aunque alcancen el tamaño de adultos, los guepardos jóvenes no pueden todavía captar los antélopes rápidos sin ayuda de la madre. Sólo a la edad de 18-22 meses se independizan completamente.

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