Los ailúridos Ailuridae
El panda rojo o panda menor Ailurus fulgens
El panda rojo o panda menor (Ailurus fulgens) es una especie de mamífero omnívoro de la familia Ailuridae, aunque se había clasificado dentro de las familias de los prociónidos y de los úrsidos. Es la única especie del género Ailurus, y la única de la familia Ailuridae; se halla dentro de las especies en peligro de extinción, ya que sus poblaciones se encuentran amenazadas por la pérdida de hábitat, la caza furtiva y la endogamia, y están protegidos por las leyes nacionales de algunos países.
Descripción
En China, por el color de su pelaje y su parecido en tamaño con el zorro, el panda rojo se llama hunho – «zorro de fuego». Sin duda, es una palabra con la que todos los usuarios de Internet están familiarizados, ya que fue utilizada por Mozilla para nombrar su navegador MozillaFirefox. El nombre moderno, poético e increíblemente apropiado de Ailurus fulgens fue sugerido por el naturalista y científico francés F. Cuvier.
El panda rojo no es un animal grande, ya que mide unos 60 cm de largo y no pesa más de 6 kg. El cuerpo del panda rojo es alargado, su cola esponjosa mide entre 28 y 48 cm de largo (difiere de una especie a otra), su cabeza es ancha, sus orejas pequeñas y redondeadas, y sus ojos también son pequeños. La frente convexa le da las proporciones de la cabeza típicas de los cachorros, lo que confiere a la bestia una ternura inusual. Cerca de los ojos, esta bestia tiene un patrón en forma de máscara, cuyo contorno es único para cada individuo. Sus patas cortas y fuertes, con garras semirretráctiles, permiten al Ailurus fulgens subir y bajar de los árboles con facilidad. En la muñeca, este simpático animalito tiene un «dedo extra», una parte ampliada de uno de los huesos de la pata delantera. Se opone a los otros dedos y permite al panda rojo sujetar ramas de bambú en sus patas.
Modo de vida y dieta
Los pandas están activos sobre todo por la noche, durante el día suelen dormir en los árboles, acurrucados y cubriéndose la cabeza con la cola a modo de manta. Estos animales se mueven con lentitud y torpeza en el suelo, pero son excelentes trepadores de árboles; no obstante, se alimentan principalmente en el suelo.
El panda rojo es carnívoro, pero el 95% de su dieta consiste en hojas jóvenes y brotes de bambú. Es un alimento muy poco calórico. Aunque, debido a las numerosas muelas de sus dientes, el panda rojo es capaz de triturar y masticar bien las fibras vegetales, su organismo no asimila más que una cuarta parte de la energía contenida en ellas. Esta es la razón por la que los pandas tienen que comer mucho bambú y pasar 13 horas al día comiéndolo. En invierno esto no es suficiente, y el panda rojo tiene que incluir en su menú diversas vainas, bayas, setas, huevos de aves e incluso pequeños roedores.
Reproducción
El panda rojo vive en solitario, cada individuo tiene su propio territorio y lo marca con una secreción especial de las glándulas anales, orina o excrementos. En un nido de ramas y hojas, la hembra da a luz a 1 ó 2 cachorros ciegos y sordos que pesan unos 100 g. Nacen entre 90 y 145 días después del apareamiento, pero el embarazo «real» sólo dura unos 50 días. La cuestión es que el feto no empieza a desarrollarse hasta después de un periodo de tiempo bastante largo tras la concepción (la llamada fase latente del embarazo).
Las crías crecen muy lentamente: sus ojos no se abren hasta el 18º día, y a los tres meses de edad su pelaje gris adquiere un color rojizo característico de los adultos; empiezan a salir del nido y a alimentarse con comida sólida. Los jóvenes pandas vagan con su madre por su propiedad hasta mediados del invierno (y posiblemente durante todo un año).
Estado de conservación
El panda rojo está incluido en el Libro Rojo Internacional de Datos con el estatus de «especie en peligro». Afortunadamente se reproduce bien en cautividad.