Burro

Hace mucho tiempo, mucho antes de que tuviéramos coches y bicicletas, la gente domesticó a un burro. Descubrieron que los burros son unos ayudantes increíbles que pueden llevar cargas pesadas a sus espaldas.

¿Has visto alguna vez un burro? Es un animal precioso, con grandes orejas y suave pelaje gris, marrón o incluso blanco. Las orejas del burro son largas y muy sensibles. El burro puede oír a gran distancia. Estas orejas también le ayudan a refrescarse cuando hace calor.

Si te fijas en la cola del burro, puedes ver un largo cepillo en su extremo. Es como un cepillo que el burro puede utilizar para ahuyentar a las molestas moscas.

Los burros son amistosos, pero a veces pueden ser testarudos. Si un burro decide que no le apetece seguir adelante, puede simplemente pararse y quedarse ahí hasta que no quiera seguir. "¡Testarudo como un burro!" - dice la gente y sonríe porque sabe que cada animal tiene sus propias características.

Los burros ayudan a la gente

Hace mucho tiempo, incluso antes de que la gente tuviera coches y otras máquinas, los burros les ayudaban en distintos trabajos. Llevaban cargas pesadas, ayudaban en el campo y eran amigos de los niños. E incluso ahora, en algunos países, los burros siguen ayudando a la gente.

El superpoder de los burros

Los burros tienen una habilidad asombrosa: pueden vivir durante largos periodos de tiempo sin comida ni agua. Esto los convierte en compañeros ideales para viajes largos.

Mamá burra

Los burros son mamás muy cariñosas. Adoran a sus pequeños. Una mamá burra siempre se asegura de que el burrito esté vigilado. Y, por supuesto, alimenta a su cría con la leche más deliciosa.

Curiosidades sobre los burros

¿Sabías que los burros pueden gritar muy alto? Su grito puede oírse a gran distancia. Pero no te preocupes, no gritan para asustarte, es sólo su forma de comunicarse. Los burros también son muy inteligentes y adiestrables. Puedes enseñarles todo tipo de trucos si te acercas a ellos con cariño y paciencia.

Así que si tienes la suerte de encontrarte con un burro, no dejes de acariciarle detrás de su gran oreja y sonreírle; al fin y al cabo, es un amigo tan amable y leal como muchos otros animales.