El buitre cabeciblanco (Trigonoceps occipitalis)
Descripción y hábitat
El buitre cabeciblanco (Trigonoceps occipitalis) es una especie de ave accipitriforme de la familia Accipitridae. El buitre cabeciblanco africano (Trigonoceps occipitalis) se distribuye por una amplia zona al sur del Sáhara. Es un buitre de tamaño medio con una envergadura de 2,3 m, una longitud corporal de 75 a 80 cm y un peso de 3 a 5 kg. El pico del Trigonoceps occipitalis es de un color inusual: es azul en la base y rojo brillante en la punta. Este buitre nunca se posa cerca de los humanos para alimentarse de sus desechos, como el marabú africano.
Reproducción
Trigonoceps occipitalis construye un enorme nido de finas ramitas en las copas de los baobabs u otros árboles muy altos. Trigonoceps occipitalis forma parejas permanentes, normalmente con un huevo blanco en la nidada. Ambos padres alimentan a las crías con comida que traen en un gran bocio.
Nutrición
Salen a buscar a sus presas al amanecer, volando suavemente en círculos hasta 1,6 km en el cielo. Utilizan su aguda vista para detectar la carroña adecuada y descienden rápidamente. No observan a otros buitres, sino que prefieren buscar comida por su cuenta. La comida de Trigonoceps occipitalis a veces ya está muy estropeada. Cualquier otra criatura moriría inmediatamente de toxinas tras comer carne podrida, pero estos halcones tienen un estómago bastante fuerte. La acidez de su estómago es muy alta, lo que le permite digerir los huesos y matar todas las bacterias muertas. El proceso de descontaminación continúa en el intestino del ave, donde unas bacterias simbióticas especiales limpian el alimento de toxinas bacterianas. Además de carroña, esta especie de buitre, al igual que sus parientes más cercanos, se alimenta de lagartos, polluelos, huevos, insectos y algunos animales enfermos. Es capaz de matar a una cría débil de antílope o capturar un pequeño roedor para desayunar. La alimentación vegetal es muy escasa en los buitres, y no abunda en los bosques secos y sabanas con escasos árboles.
Estado de conservación
Trigonoceps occipitalis es muy rara y está en peligro de extinción.