Los pelícanos (el género Pelecanus)
Descripción y particularidades
Los pelícanos (Pelecanus) son un género de aves acuáticas pelecaniformes pertenecientes a la familia monotípica Pelecanidae.
Pelecanus dio su nombre a todo el género. Estas aves tienen un aspecto tan característico que no pueden confundirse con ninguna otra. Por supuesto, su característica más interesante es la estructura de su pico: es muy grande y plano, con un gancho en el extremo y un saco coriáceo que se estira fuertemente en la mandíbula inferior. El cuerpo de los pelícanos es macizo y la cola y las patas son cortas. Pueden caminar una buena distancia sobre el suelo, aunque parecen bastante torpes. Los pelícanos tienen un vuelo muy bonito: suave y lento. Pueden volar durante unas veinticuatro horas sin descansar y cubrir una distancia de hasta 500 km. A pesar de su impresionante tamaño y una envergadura de más de tres metros, los pelícanos pesan relativamente poco porque tienen huesos huecos y muy ligeros y todo su cuerpo está cubierto por una red de sacos aéreos. Los pelícanos suelen utilizar corrientes de aire ascendentes y se elevan por encima del suelo durante largos periodos. Pero no es fácil para un ave tan grande y pesada despegar de una superficie llana: necesita mucho espacio y un despegue previo para alzar el vuelo.
Distribución y reproducción
Pelecanus tiene un solo género con 7-8 especies. La mayoría de ellas viven en aguas interiores y deltas fluviales, y sólo el pelícano pardo puede considerarse una auténtica ave marina. Los pelícanos no sólo viven en los trópicos, también habitan en zonas templadas, siempre que haya aguas poco profundas amplias y ricas en peces. Como todos los omnípedos, los pelícanos anidan en colonias, a veces muy numerosas. Por ejemplo, una colonia de pelícanos rosados en un lago de Tanzania cuenta con unas 40.000 parejas reproductoras.
Estas aves construyen sus grandes y desordenados nidos en el suelo o en los árboles. Tienen una nidada de 2-3 huevos y los padres los incuban durante 30-36 días, a partir de la puesta del primer huevo. Esto hace que los pollos no nazcan al mismo tiempo y tengan distintas posibilidades de sobrevivir. Los más grandes (mayores) tienen ventaja en la alimentación, mientras que los más pequeños y débiles (jóvenes) apenas reciben alimento y a menudo mueren. El periodo de cría dura al menos dos meses. Al principio, los padres les llevan comida semilíquida (una especie de "sopa de pescado") 30 veces al día, pero a medida que las crías crecen, acuden al nido cada vez con menos frecuencia. Los polluelos de las especies que anidan en tierra suelen abandonar el nido al mes de edad y se juntan en una "guardería" que puede contener hasta cien pelícanos jóvenes. Los padres que llegan sólo alimentan a sus polluelos, a veces buscándolos mucho tiempo antes.
En Rusia hay dos especies: la rosada y la rizada, ambas anidan en el delta del Volga y figuran en la Lista Roja de la UICN.
Nutrición
Estas aves se alimentan casi exclusivamente de peces y los capturan sumergiendo la cabeza y el cuello bajo el agua y sacándolos con el pico abierto a modo de red. Sólo el pelícano pardo utiliza una técnica completamente distinta: busca a su presa desde el aire y se sumerge para atraparla a una profundidad de hasta 3 metros. El pez más grande jamás capturado por un pelícano y posteriormente capturado por ornitólogos de corazón duro pesaba 1850 gramos. Es sumamente interesante la caza colectiva de los pelícanos, durante la cual un grupo de 8-12, y a veces incluso 40 aves, actúan de forma sincronizada y coordinada. Los pelícanos rusos se mueven ruidosamente hacia la orilla, batiendo las alas y, en ocasiones, sumergiendo la parte delantera del cuerpo en el agua. A menudo se les unen cormoranes que suelen ir por delante de los pelícanos y se zambullen momentáneamente para asustar aún más a los peces. Cuando esta masa de cazadores se acerca a la orilla y los peces cazados son capturados, se produce tal conmoción que si no se ha visto la caza es difícil hacerse una idea de ella.