Clasificación de los Perisodáctilos
2. Asno salvaje asiático
3. Kiang
4. Cebra de llanura
5. Cebra de Grevy
6. Cebra de montaña de Hartmann
7. Caballo
8. Caballo de Przewalski
9. Rinoceronte blanco
10. Rinoceronte negro
11. Rinoceronte indio
12. Tapir centroamericano
13. Tapir amazónico
14. Tapir malayo
15. Tapir andino
Descripción
Los perisodáctilos, Perissodactyla o ungulados de dedos impares (del griego antiguo περισσός perissós, «impar»; y δάκτυλος dáktylos, «dedo»), son un orden de mamíferos placentarios. La lista de los perisodáctilos incluye animales tan diversos como los gráciles caballos, los graciosos tapires y los pesados rinocerontes. ¿Qué tienen en común? En primer lugar, todos estos animales se alimentan de hierbas, por lo que sus molares tienen crestas transversales y longitudinales en sus superficies de masticación y están bien adaptados para masticar alimentos vegetales duros. En segundo lugar, tienen una estructura de extremidades similar: un número impar de dedos protegidos por formaciones córneas especiales: las pezuñas. En tercer lugar, todos los perisodáctilos se caracterizan por tener un estómago simple unicompartimental e intestinos muy largos.
Diferencias con Artiodactyla
Durante la evolución, los perisodáctilos se enfrentaron a la competencia de los Artiodactyla, otro grupo de herbívoros, y parece que perdieron esta guerra. Ambos grupos tienen una «cámara de fermentación» en sus tractos digestivos, donde los microorganismos simbióticos fermentan aún más la hierba masticada, pero los Artiodactyla tienen un rumen en la parte delantera del estómago y los perisodáctilos tienen un ciego detrás. Los primeros digieren los alimentos lentamente y sin prisas, extrayendo de ellos todo lo posible; los segundos, por el contrario, empujan la hierba a través del estómago con extrema rapidez. Los perisodáctilos son menos productivos en la digestión, lo que puede ser una de las razones por las que fueron expulsados por los Artiodactyla y posteriormente se extinguieron. La baja tasa de reproducción característica de estos animales también contribuyó a ello.
Los perisodáctilos maduran sexualmente de forma tardía, con largos periodos de gestación y pocas crías: la hembra suele parir una sola cría (aunque puede seguir a su madre durante varias horas después del parto) y la alimenta durante al menos un año. De las 600 especies de los perisodáctilos que pertenecen a 12 familias, sólo existen hoy 16 especies de 3 familias, y muchas de ellas son tan raras que están incluidas en la Lista Roja internacional.
Todos los perisodáctilos son mamíferos terrestres de gran a muy gran tamaño, con una longitud corporal de entre 180 y 420 cm y un peso de entre 150 y 3500 kg.