Sifaca de Verreaux Propithecus verreauxi
El sifaca de Verreaux (Propithecus verreauxi) es un primate estrepsirrino de la familia Indriidae. Se encuentra en Madagascar, donde habita en amplias zonas tanto de selva tropical como de bosque caducifolio seco. Su pelaje es grueso, generalmente blanco, con marcas oscuras en los costados, la cabeza y los brazos. Como todas las sifas, tiene una larga cola, que utiliza como equilibrador cuando salta de un árbol a otro. Adaptado a vivir en los árboles, salta cuando se desplaza por el suelo. Forma pequeños grupos. Mide de 42 a 45 cm de largo y su cola de 56 a 60 cm. Las hembras pesan una media de 3,4 kg, los machos 3,6 kg. Tiene un cráneo relativamente bajo y plano. La cara es más ancha que la de otros indriyas y el hocico es más corto. Los incisivos superiores son muy pequeños y apuntan hacia adentro. La mandíbula inferior forma un peine de dientes, los molares tienen una cúspide, que ayuda a triturar las hojas al masticar. El tórax es más ancho que el de la mayoría de los lémures.
Se alimenta más a menudo por la mañana o cerca de la tarde, descansando durante el calor del mediodía. Su dieta consiste principalmente en hojas, pero también comen frutas, corteza de árbol y flores. Prefiere las hojas con bajo contenido en taninos. Es un animal diurno, que pasa la parte más calurosa del día descansando al sol, extendiendo sus extremidades. Viven en los árboles, desplazándose en las copas a saltos, saltando a veces 9-10 m. En el suelo, se mueven saltando sobre dos patas.
Forman pequeños grupos familiares de 2 a 12, compuestos por un macho y una hembra, o varios machos y hembras a la vez. El comportamiento territorial está poco desarrollado; suelen proteger las fuentes de alimento más que el territorio de otros grupos. Las hembras dominan a los machos en el grupo. Las hembras producen una secreción anal-oral que sirve para marcar los límites del territorio, mientras que la secreción de los machos (de las glándulas anal-oral y de la garganta) sirve más para atraer a la pareja que para fines territoriales. Algunos machos tienen una capa marrón de esta secreción en sus pechos.
Los machos y las hembras a veces prestan servicios de limpieza del pelaje a cambio de alguna recompensa, como el cepillado recíproco o en la época de celo para el apareamiento (el macho ofrece el cepillado, la hembra el apareamiento). Los estudios han demostrado que las hembras son más propensas a aparearse con los machos cuyos pechos están más teñidos de secreción. Por otro lado, los machos con pechos claros son más propensos a ofrecer servicios de limpieza a las hembras, lo que también acaba en apareamiento. Se ha comprobado que después de casos de agresión entre dos indris crestados, suelen reconciliarse y restablecer relaciones amistosas, esto suele ocurrir cuando no hay comida de por medio en el conflicto. Los indris con cresta conservan el interés por el juego hasta bien entrada la edad adulta, cuando el juego se utiliza durante la época de apareamiento. La preñez dura 130 días, tras los cuales nace una sola cría. Los nacimientos suelen tener lugar entre junio y agosto. La cría se aferra al vientre de su madre durante las primeras 6-8 semanas, la madre lleva a la cría a la espalda durante las siguientes 19 semanas.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) ha otorgado a la especie un estatus de conservación «vulnerable».