Ardilla de Prevost Callosciurus prevostii
La ardilla de Prevost (Callosciurus prevostii) es una especie de roedor de la familia Sciuridae. También se la conoce como ardilla tricolor. Su brillante y contrastada coloración la convierte en una de las especies de ardillas más espectaculares, no en vano su nombre en latín del género Callosciurus se traduce como «ardilla hermosa». Es común en el sudeste asiático: Tailandia, Indonesia, Malasia y muchas islas pequeñas. La ardilla de Prevost tiene un peso medio de unos 400-500 g, una longitud corporal de 20-28 cm y una longitud de cola de 15-25 cm. Su pelaje es suave y poco esponjoso.
Estos roedores viven en bosques húmedos de tierras bajas a media altura y bajo el dosel del bosque, donde hacen nidos con ramas y hojas o se instalan en los huecos de los árboles. La ardilla de Prevost es especialmente activa al amanecer y al atardecer. Se alimentan de yemas, brotes, frutos secos, semillas, frutas (sobre todo higos), capullos y flores; en busca de alimento visitan las plantaciones de palmeras. Ocasionalmente, la ardilla de Prevost come huevos de pájaros, insectos y larvas de escarabajos. Como nuestras ardillas comunes, se abastecen de comida.
La ardilla de Prevost vive sola o en parejas, pero a veces se reúne en grupos, por ejemplo, mientras se alimenta. Se reproducen durante todo el año y, poco antes de dar a luz, la hembra abandona su hogar habitual en una hondonada y construye un nuevo nido en lo alto de un árbol, una enorme estructura de ramitas y hojas. Aquí, a salvo de los depredadores terrestres, tras un periodo de gestación de 40 días, dará a luz a 3-4 crías, de aproximadamente 16 g de peso.
Los adultos probablemente alimentan a sus crías con semillas. Los científicos creen que en algunas zonas se producen entre 3 y 4 crías al año. La ardilla de Prevost es bastante adaptable a las condiciones ambientales cambiantes. A pesar de la pérdida localizada de hábitat y de que las poblaciones de algunas zonas se encuentran en estado crítico, la supervivencia global de la especie no está actualmente seriamente amenazada.
