¡Bienvenidos al Reino animal!
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La víbora común europea (Vipera berus)

Фото Víbora común europea
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Фото Víbora común europea
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Apariencia

La víbora común europea (Vipera berus) es una especie de serpiente venenosa que pertenece a la familia de las víboras (Viperidae).

En los bosques de la zona media es bastante frecuente encontrarse con una pequeña serpiente de color moteado: se trata de la víbora común (Vipera berus). Normalmente su longitud es de unos 50 cm, pero hay ejemplares que alcanzan los 90 cm, y las hembras son algo mayores que los machos. El peso de la Vipera berus adulta varía de 50 a 180 g. La gran cabeza aplanada de la víbora, con el hocico redondeado, está marcadamente separada del cuerpo por un interceptor corto en el cuello. Por regla general, las víboras presentan un característico dibujo en zigzag en el dorso. La coloración de estas serpientes es extremadamente variable: el fondo general de coloración puede ser gris (tonos claros y oscuros), marrón, rojo, rojo cereza, marrón amarillento o rojizo con tinte cobrizo. En algunas zonas, hasta el 50 % de la población son víboras negras melánicas. El abdomen de la Vipera berus es gris, marrón grisáceo o negro, a veces con manchas blancas, la punta de la cola es amarilla, naranja o roja. En los juveniles, el dorso suele ser de color pardo cobrizo con una raya en zigzag.

Comportamiento

El dibujo en zigzag del dorso de la Vipera berus se parece mucho a la sombra quebrada de las hojas de los helechos y de varios arbustos pequeños. Esta coloración permite a la serpiente mimetizarse con el patrón del resplandor del sol y las sombras. Ni el hombre ni el animal se percatan de que la Vipera berus está inmóvil y se acercan a ella a una distancia demasiado corta. La asustada serpiente recurre a la autodefensa: muerde al invitado inesperado. Suele ocurrir si una persona presiona a la serpiente con la mano o el pie. El comportamiento de las serpientes al encontrarse con una persona depende en gran medida del grado de calentamiento. En tiempo fresco, nublado o lluvioso, cuando las Vipera berus están frías, sus movimientos son perezosos, lentos, inseguros. En tiempo seco y caluroso, las serpientes son mucho más activas y rápidas. Sin embargo, incluso una serpiente activa, cuando se da cuenta de la presencia humana, suele intentar arrastrarse hasta el refugio más cercano. Pronto reaparece y, tras mirar a su alrededor, se posa en el mismo lugar. Cuando una serpiente activa es perseguida y no tiene dónde esconderse, empieza a defenderse: apretada en un bulto, con un silbido lanza la cabeza en dirección al perseguidor. Pero incluso en este caso, tiende a acercarse a cualquier refugio y deslizarse en él. En caso de persecución persistente, la Vipera berus se vuelve feroz y bastante peligrosa. Encogiéndose rápidamente en un bulto e inmediatamente extendiéndose en toda su longitud, como si saltara por encima del suelo, intenta acercarse a una persona. Sus movimientos son tan rápidos que resulta difícil seguirlos.

La Vipera berus es una serpiente precavida, no le gustan las molestias y siempre intenta evitar el encuentro con los humanos. Sin embargo, el número de víctimas de mordeduras de víbora crece de año en año. La razón no es que la Vipera berus se haya vuelto menos precavida y le guste asentarse cerca de la gente, sino en el hecho de que la deforestación, los incendios forestales, la construcción masiva de dachas en ciénagas desecadas hacen que la Vipera berus se desplace en busca de nuevos lugares para vivir, lo que aumenta la probabilidad de que se encuentre con humanos. Además, en los últimos años ha disminuido notablemente el número de erizos, enemigos naturales de la Vipera berus.

Veneno de Vipera berus

Los principales componentes activos del veneno de víbora son proteasas de alto peso molecular de acción hemorrágica, hemocoagulante y necrotizante y citotoxinas neurotrópicas de bajo peso molecular, aunque en menor cantidad que en el veneno de cobra. Tras la mordedura de Vipera berus, se producen con bastante rapidez edema hemorrágico, necrosis e impregnación hemorrágica de los tejidos en la zona de inyección del veneno, acompañados de mareos, letargo, dolor de cabeza, náuseas, respiración. Posteriormente se desarrolla un shock progresivo de génesis compleja, anemia aguda, coagulación intravascular de la sangre, aumento de la permeabilidad capilar. En casos graves, se producen cambios distróficos en el hígado y los riñones.

Distribución

Vipera berus se distribuye en mosaico en una franja de bosques euroasiáticos desde Gran Bretaña, Francia y el norte de Italia en el oeste hasta Sajalín y Corea en el este. En Europa oriental, Vipera berus penetra ocasionalmente más allá del Círculo Polar Ártico, por ejemplo, en la Reserva Natural de Laponia y en las costas del Mar de Barents. En el sur, el área de distribución de Vipera berus se limita a las zonas esteparias. El límite sudoriental de su área de distribución se sitúa en Mongolia, el noroeste y el noreste de China.

Esperanza de vida

La esperanza de vida puede alcanzar los 15 años y, según algunos informes, incluso los 30 años. Sin embargo, las observaciones realizadas en Suecia muestran que las serpientes rara vez sobreviven más de dos o tres años de cría, lo que, teniendo en cuenta la madurez sexual, da un límite de 5-7 años.

Modo de vida y comportamiento invernal

La Vipera berus se adapta rápidamente a cualquier terreno, en los Alpes se eleva hasta 2600 m sobre el nivel del mar. Sus hábitats son más diversos en la parte septentrional y oriental de su área de distribución, donde la víbora suele ocupar turberas, brezales, bosques mixtos aclarados, orillas de diversas masas de agua dulce, bosques húmedos, márgenes de campos, franjas de campos, dunas. En el sur de Europa, los biotopos se limitan principalmente a depresiones húmedas en terrenos montañosos. Las víboras son sedentarias, por regla general no se desplazan más allá de 60-100 metros. La excepción es la migración forzada al lugar de hibernación, en este caso las víboras pueden alejarse hasta 2-5 km.

La hibernación de la Vipera berus suele tener lugar de octubre-noviembre a marzo-abril (dependiendo del clima), en el norte de la zona dura hasta 9 meses, para lo cual la serpiente elige un hueco en el suelo (madrigueras, grietas, etc.) a una profundidad de hasta 2 metros, donde la temperatura no desciende por debajo de +2- +4 °C. En caso de escasez de tales lugares, pueden acumularse en un sitio varios centenares de individuos, que se arrastran a la superficie en primavera, creando una impresión de gran aglomeración. Posteriormente, las serpientes se dispersan.

Nutrición

La Vipera berus se alimenta principalmente de roedores, anfibios, lagartos y ruinas de nidos de aves situados en el suelo. La proporción de los distintos alimentos puede variar en función de la disponibilidad en un momento dado y en una zona determinada. Por ejemplo, durante la observación de la Vipera berus en los Países Bajos, se descubrió que prefiere las ranas herbívoras, las ranas de nariz afilada y las lagartijas vivas. En otras regiones, la dieta puede estar dominada por topillos grises y de bosque, musarañas, musarañas, husos y pollos de pequeños paseriformes. Las serpientes jóvenes capturan insectos como langostas, escarabajos y, con menor frecuencia, orugas, hormigas, babosas y lombrices.

Reproducción

La época de apareamiento de la Vipera berus es en mayo, y las crías aparecen en agosto o septiembre, según el clima. La víbora es vivípara, es decir, los huevos se desarrollan y eclosionan en el útero. Por lo general, la hembra produce hasta 8-12 crías. Las crías recién nacidas miden entre 15 y 20 cm y ya son venenosas. Sólo después de nacer, las serpientes suelen mudar, en el futuro la muda de jóvenes y adultos se produce 1-2 veces al mes.

Subespecie

  • Vipera berus berus (Linnaeus, 1758);
  • Vipera berus bosniensis Boettger, 1889;
  • Vipera berus sachalinensis;
  • Zarevskij, 1917.
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