La cachama negra (Colossoma macropomum), cherna, gamitana, tambaquí o pacú negro
Cachama negra видео
La cachama negra (Colossoma macropomum) es una especie de pez de la familia Serrasalmidae, conocida también como cherna, gamitana, tambaquí o pacú negro, originaria de la cuenca del Orinoco y de la Amazonia. Es la única especie del género Colossoma.
Tiene un comportamiento migratorio (reofílico) y se desplaza muchos kilómetros aguas arriba, durante el verano. Su reproducción se cumple cada año, cíclicamente, en el invierno: deja sus huevos fertilizados en la margen de los ríos y en zonas recién inundadas, donde crecen los alevines silvestres. Inicialmente no presenta dimorfismo sexual y sólo alcanza la madurez sexual a los 3 años. Los adultos miden de 7 a 12 dm de largo, y hasta 35 kg de peso; son de color gris a negro; sus aletas pectorales son pequeñas, y negras como el resto de las aletas. Se alimentan principalmente de microcrustáceos planctónicos, frutos, algas y larvas.
Distribución
El tambaqui es nativo de los hábitats de agua dulce de las cuencas del Amazonas y el Orinoco en la Sudamérica tropical. En los ríos de aguas blancas ricos en nutrientes, como el Madeira, el Juruá, el Putumayo (Içá) y el Purus, se distribuye por toda la cuenca hasta sus cabeceras. En ríos de aguas negras pobres en nutrientes, como el río Negro, y ríos de aguas claras, como varios afluentes de la ribera derecha del Madeira, por lo general sólo se encuentra en los 300 km inferiores y es rara más allá de los 150 km inferiores. Se cría mucho en acuicultura fuera de su área de distribución nativa en Sudamérica. Se conocen fósiles del Mioceno en el río Magdalena, pero su presencia moderna en este río se debe a la introducción humana.
Descripción
El tambaqui es el characín más pesado de América (el Salminus, más ligero, puede crecer más) y el segundo pez de agua dulce con escamas más pesado de Sudamérica (después del arapaima). Puede alcanzar hasta 1,1 m (3,6 pies) de longitud total y 44 kg (97 libras) de peso, pero un tamaño más típico es de 0,7 m (2,3 pies). El mayor capturado con caña y anzuelo y reconocido por la IGFA pesó 32,4 kg (71 lb). Después de la temporada de inundación, alrededor del 10% del peso de un tambaqui son las reservas de grasa visceral y al menos otro 5% es grasa que se encuentra en la cabeza y los músculos.
Su forma es similar a la de la piraña y a veces se confunde a los juveniles con este pez carnívoro; el tambaqui es alto y comprimido lateralmente, con ojos grandes y la espalda ligeramente arqueada. A diferencia de otras especies depredadoras, los dientes del tambaqui son molares, una adaptación para triturar semillas y frutos secos. La mitad inferior de su cuerpo suele ser principalmente negruzca. El resto es principalmente gris, amarillento u oliva, pero el tono exacto varía considerablemente y depende en parte del hábitat, siendo los individuos de aguas negras mucho más oscuros que los de aguas blancas. Las aletas pélvica, anal y las pequeñas pectorales son negras. El tambaqui se parece a la pirapitinga (Piaractus brachypomus), pero esta última especie tiene un perfil de cabeza más redondeado (menos alargado y puntiagudo) y una aleta adiposa más pequeña que carece de radios, así como diferencias en los dientes y el opérculo.
Se han producido híbridos entre el tambaqui y el Piaractus (ambas especies similares) en acuicultura, y se ven ocasionalmente en la naturaleza. Las crías híbridas pueden ser difíciles de identificar sólo por su Apariencia.
Hábitat, reproducción y migración
Esta especie es principalmente solitaria, pero migra en grandes cardúmenes. Durante la época no reproductora, los adultos permanecen en bosques inundados de ríos de aguas blancas (várzea), claras y negras (igapó). Permanecen allí de cuatro a siete meses durante la estación de crecidas, pero cuando baja el nivel del agua se trasladan a los canales principales de los ríos o, en menor medida, a los lagos de las llanuras aluviales. Al comienzo de la siguiente temporada de crecidas, grandes bancos se trasladan a los ríos de aguas bravas, donde desovan entre noviembre y febrero. El lugar exacto de desove en los ríos de aguas bravas no es del todo seguro, pero al parecer es a lo largo de orillas arboladas o diques cubiertos de hierba. A continuación, los bancos se separan cuando los adultos regresan al bosque inundado de los ríos de aguas blancas, claras y negras, y se repite el patrón anual. Las larvas se encuentran en ríos de aguas blancas, incluido el propio río Amazonas. Los juveniles permanecen cerca de los macrófitos en las llanuras aluviales y los bosques inundados durante todo el año, y sólo cambian al patrón de migración de los adultos cuando alcanzan la madurez sexual. La madurez se alcanza con una longitud de unos 60 cm (2 pies).
La especie alcanza regularmente una edad de 40 años y puede llegar hasta los 65.
Resistencia al oxígeno, la sal y el pH
Cuando no hay suficiente oxígeno en el río o el lago, los tambaquíes lo obtienen del aire. Esto lo consiguen gracias a las partes físicas e internas de su cuerpo, como las branquias y la vascularización de la vejiga natatoria.
El tambaqui es un pez que vive en agua dulce. Los juveniles pueden sobrevivir en agua salobre cuando se aumenta gradualmente la salinidad. Los niveles de salinidad superiores a 20 g/L provocan la muerte. Cuando los juveniles se crían en salinidades superiores a 10 g/L, se produce un efecto perjudicial significativo en el crecimiento, los parámetros hematológicos y la osmorregulación.
En un experimento, se modificó el pH del agua de los tambaqui. No se produjo ninguna muerte de tambaqui si el pH no descendía a 3,0. La única diferencia interna que se observó en los tambaqui cuando se alteraba el pH fue un cambio en el ácido-base del plasma y los glóbulos rojos.
En otro experimento, se expuso a los tambaquis a descensos del pH de 6,0 a 4,0, similares a los que encontrarían en su hábitat natural. Los investigadores descubrieron que las comunidades microbianas del intestino de los peces tambaqui eran muy resistentes a las bajadas de pH, lo que podría explicar en parte la capacidad de los tambaquis para migrar entre los arroyos de aguas blancas y negras del Amazonas.
Nutrición
El tambaqui consume frutos y semillas, especialmente de angiospermas leñosas y especies herbáceas. Dependiendo de la cantidad y la calidad de estos alimentos, los peces deciden la ubicación de su hábitat. En un estudio realizado durante la temporada de aguas altas, entre el 78 y el 98% de la nutrición consistía en frutas. Otro estudio del contenido estomacal de 138 ejemplares durante la temporada de aguas altas reveló que el 44% del peso eran frutas y semillas, el 30% zooplancton y el 22% arroz salvaje. Entre los 125 ejemplares de la temporada de aguas bajas, un porcentaje mayor tenía el estómago vacío (14%, unas diez veces más que en la temporada de aguas altas) y cerca del 70% del peso total del contenido estomacal era zooplancton. Además de semillas, frutos, arroz salvaje y zooplancton, se consumen cantidades menores de insectos, caracoles, gambas, peces pequeños, algas filamentosas y plantas en descomposición.
Dispersión de semillas
El tambaqui desempeña un papel importante en la dispersión de semillas de plantas. Las semillas de los frutos que caen al agua son consumidas por el tambaqui y la semilla se dispersa en otro lugar; esto es similar a lo que hacen las aves. Este consumo incluye alrededor del 35% de los árboles y lianas durante la temporada de inundaciones y estas semillas pueden crecer después de que el agua de la inundación se calme. En comparación con los tambaquíes más jóvenes y pequeños, los tambaquíes más grandes y viejos son capaces de dispersar las semillas a un ritmo más rápido. El intestino de un tambaqui bien alimentado de 10 kg (22 lb) puede contener más de 1 kg (2,2 lb) de semillas. En general, el pirapitinga (Piaractus brachypomus) es capaz de pasar más semillas intactas que el tambaqui, lo que significa que el primero es un dispersor de semillas más eficiente.
Relación con el hombre
La carne del tambaqui es popular y alcanza precios elevados en los mercados de pescado de su área de distribución nativa. Se comercializa fresca y congelada.
Las poblaciones silvestres de tambaqui han disminuido debido a la sobrepesca y muchos de los peces capturados actualmente son juveniles. Sólo en Manaos, los desembarcos cayeron de unas 15.000 toneladas métricas (14.800 toneladas largas) al año en la década de 1970 a 800 toneladas métricas (790 toneladas largas) en 1996. Según un estudio del IBAMA, fue el undécimo pez más capturado en la Amazonia brasileña en 1998 (justo por delante de la pirapitinga, Piaractus brachypomus).
Actualmente, el tambaqui se cría mucho en acuicultura. Puede vivir en aguas pobres en oxígeno y es muy resistente a las enfermedades. En Brasil, el tambaqui es una de las principales especies de peces de piscifactoría, por lo que es importante para la economía del país. Los estudios sobre el tambaqui de piscifactoría en Brasil han revelado una diversidad genética similar a la observada entre las poblaciones salvajes. En las piscifactorías, esta especie se hibrida a veces con Piaractus para producir crías que aceptan un rango de temperaturas más amplio (aguas más frías) que el tambaqui puro.
En Tailandia, este pez, conocido localmente como pla khu dam, fue introducido desde Hong Kong y Singapur como parte de proyectos de piscicultura, pero se ha adaptado a las condiciones locales y prospera en estado salvaje en algunas zonas. También hay una población introducida en Puerto Rico y se han capturado ejemplares solitarios (probablemente liberados deliberadamente por acuaristas) en una gran variedad de estados de EE.UU., pero sólo sobreviven los de las regiones más cálidas.
Los juveniles de 5-7,5 cm (2-3 pulgadas) de longitud, a veces etiquetados como "piraña vegetariana", se ven con frecuencia en el comercio de acuarios, pero crecen rápidamente hasta alcanzar un gran tamaño y requieren un tanque enorme.
Comercialización y cruzamiento
La cachama negra es especialmente apetecida por su calidad. La acuicultura de la cachama se ha desarrollado notablemente mediante la reproducción artificial o inducida, multiplicándose así su comercialización. Se ha producido una especie híbrida de la cachama negra y la cachama roja (Piaractus brachypomus), a la cual se le denomina tambacú o cachamoto, gracias a ese tipo de cruce, las cachamas resultantes toman un color dorado oscuro.
