¡Bienvenidos al Reino animal!
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Boa arborícola de Madagascar (Sanzinia madagascariensis)

Фото Boa arborícola de Madagascar
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Descripción y distribución

Sanzinia madagascariensis (Boa arborícola de Madagascar) es una especie de serpiente del género Sanzinia de la subfamilia Sanziniinae, familia Boidae. Es endémica de Madagascar, en concreto de la isla de Nosy Be y de la costa este de la isla malgache. Sanzinia madagascariensis es endémica de Madagascar. El primero de sus nombres de especie está tomado de la lengua malgache, donde la palabra "manditra" es un nombre coloquial para este animal. La longitud de la boa adulta suele oscilar entre 122 y 152 cm, pero a menudo hay ejemplares con una longitud de 183-213 cm, y las hembras son más grandes que los machos. En los labios y bajo las escamas de esta serpiente se localizan fosas termosensibles. Existen 2 variaciones en la coloración de esta boa constrictor, algunos las consideran dos subespecies diferentes. La primera, verde o verde grisácea, es común en la parte oriental del área de distribución. La segunda es amarilla, naranja o marrón en la parte occidental del área de distribución. Curiosamente, las boas constrictoras de Madagascar, normalmente verdes, son aproximadamente una vez y media más pequeñas que las de color marrón amarillento.

Modo de vida y nutrición

Sanzinia madagascariensis prefiere vivir en árboles o arbustos y tiene un estilo de vida arborícola. Se asienta cerca de arroyos, ríos, estanques o pantanos y es activa sobre todo por la noche. La boa arborícola se alimenta principalmente de aves y murciélagos. Utiliza, entre otras cosas, fosetas sensibles al calor en los labios para detectar a sus presas. Puede abandonar los árboles para cazar pequeños mamíferos en el suelo.

Reproducción

Sanzinia madagascariensis es una serpiente que vive de los huevos. La hembra da a luz hasta 12 cachorros, cada uno de unos 38 cm de longitud. Cuando está preñada, la hembra se vuelve oscura. Así puede absorber todo el calor posible del entorno para los embriones que se desarrollan en su cuerpo. Tras el parto, recupera su coloración normal con la primera muda. Los cachorros recién nacidos son de color rojo claro. Esto es tanto una advertencia a los depredadores para que "se mantengan alejados" como un camuflaje, que funciona bien entre los colores brillantes de las copas de los árboles donde viven.

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